El asalto a la educación pública 

La Jornada, 10 de noviembre de 2009

La educación pública y los maestros están bajo ataque. Organismos empresariales, sus intelectuales y funcionarios del sector educativo disparan a mansalva contra ellos. La educación se ha vuelto un obstáculo para el avance del país, dice un periodista.“El magisterio no puede ser una actividad de quienes no pueden destacar en otras actividades”, asegura otro.“Los maestros son corruptos”, afirma uno más.“La mayoría de profesores son burros”, advierte un canal de televisión. “Ya no hacen faltan más maestros”, sentencia una autoridad.

Estas acusaciones son falsas. Buscan crear un entorno favorable hacia la privatización de la educación pública y la expansión de la influencia empresarial en la agenda educativa. Buena parte de quienes las lanzan no conocen a los maestros de carne y hueso ni las escuelas públicas. Quienes hacen estas críticas esconden sus intereses empresariales, presentándose como académicos y ciudadanos preocupados por una educación de calidad.

Las críticas más sofisticadas utilizan como argumento el bajo desempeño escolar evaluado por ENLACE, una prueba en la que la Universidad Nacional Autónoma de México se ha negado a participar porque no considera “que sea el instrumento adecuado para medir y, sobre todo, proponer modificaciones y mejoras al sistema educativo nacional”.

Esta ofensiva ni siquiera es novedosa. En muchos sentidos es una calca de la ensayada en Estados Unidos al calor de la revolución conservadora de Ronald Reagan.

Como demostraron David Berlinger y Bruce Biddle en The manufactured crisis: myths, fraud and attack on America’s public school (La crisis fabricada: mitos, fraude y ataque a la escuela pública estadunidense), en ese país se fabricó una crisis de la educación pública similar a la que se quiere provocar en México.

El libro demuestra detalladamente cómo se construyeron los mitos hostiles contra la enseñanza impartida por el Estado y los maestros; el papel que desempeñaron empresarios y funcionarios públicos, y cómo fueron ignoradas, suprimidas y distorsionadas evidencias favorables sobre las escuelas y sus logros...