La Jornada, 28 de agosto de 2012
La señal de alerta se ha encendido. La cuenta regresiva camina aceleradamente. La hora cero se acerca. El movimiento #YoSoy132 se ha declarado en alerta ante la imposición de Enrique Peña Nieto como Presidente de la República.
Como respuesta a la imposición, el movimiento en la zona metropolitana del valle de México acordó realizar una movilización fúnebre, de Ciudad Universitaria a la sede del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, una vez que este órgano emita un fallo. Las asambleas locales que lo consideren necesario efectuarán otras acciones.
Lejos de hacer cuentas alegres sobre su capacidad para revertir la decisión del Trife, #YoSoy132 ha reflexionado sobre su fuerza real en esta coyuntura. En el balance político que efectuó durante su octava Asamblea General Intrauniversitaria señaló: Hemos estado tan preocupados en invalidar las elecciones que no hemos considerado en primer lugar si podemos hacerlo. Y añadió: La situación nos está rebasando; ha ocurrido una baja en la participación, pues se cree que se está cumpliendo un programa que no ha emanado desde el movimiento mismo.
Esta sangre fría para analizar la correlación de fuerzas muestra la madurez de los jóvenes que han emprendido el camino de la transformación social. No es común encontrar en los movimientos sociales emergentes actitudes así. Por el contrario, lo usual es que se dejen llevar por el voluntarismo y la convicción de que es suficiente convocar a acciones colectivas para que éstas se lleven a cabo.
Pero esta claridad en los retos que enfrenta su movimiento no significa que hayan renunciado a tomar las calles y a protestar contra la imposición de Peña Nieto. Por el contrario. Su plan de resistencia está en marcha, y siguen surgiendo inesperadamente todo tipo de expresiones de descontento no proyectadas de antemano. Apenas el pasado viernes 24 de agosto, en Matamoros, Tamaulipas, varias decenas de estudiantes interrumpieron a gritos a Leonardo Valdés, consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE). Agentes federales tuvieron que sacar a Valdés por una puerta lateral del inmueble donde se encontraba.
El plan de acción de #YoSoy132 es de pronóstico reservado. El movimiento surgió espontáneamente y, a pesar de sus enormes esfuerzos por darse una organización representativa y estable, sigue teniendo un impulso aparentemente sin causa. Los estallidos de descontento, como el que se presentó la semana pasada en el Colegio de Ciencias y Humanidades Naucalpan, donde los estudiantes tomaron las instalaciones del plantel para protestar por el exceso de vigilancia, están a la orden del día. Lo seguirán estando...