La Jornada, 02 de agosto de 2016
Alejandro Ramírez Magaña es un empresario exitoso. Ocupó la posición 49 en el ranking de Los 100 empresarios más importantes de México 2014, de la revista Expansión. Dirige Organización Ramírez, propietaria de la empresa Cinépolis, la cadena de salas cinematográficas más grande de México. En 2015 comenzó a presidir el Consejo Mexicano de Negocios (CMN). Y, desde hace al menos 10 años, detesta y combate a los maestros críticos y a la CNTE.
Hace apenas unos cuantos días, don Alejandro publicó un artículo contra el magisterio democrático titulado El modelo de la CNTE. En él resume muchas de sus fobias hacia la Coordinadora. La acusa, sin presentar una sola prueba, de ser una organización criminal que despoja a los maestros y extorsiona al Estado. “El mayor crimen de la CNTE –asegura– es robarle el futuro a los niños y jóvenes de las regiones más marginadas del país.”
En el escrito, el líder de los patrones juzga a un movimiento genuino de bases a través de sus anteojos empresariales. Según él, los maestros democráticos rechazan la reforma educativa no porque represente un modelo antagónico al que defienden, sino por una razón mucho más pedestre: “Porque la reforma –escribe– pone fin a su modelo de negocio, el cual se ha centrado en controlar el mercado de plazas docentes, así como el pago y las promociones del magisterio”. El león cree que todos son de su condición.
El supuesto modelo de negocio de los líderes docentes develado por el empresario Ramírez es una ofensa al magisterio. Cientos de miles de maestros de base protestan en las calles contra la reforma educativa arriesgando literalmente su vida, su libertad, su seguridad física y su trabajo. Demandan estabilidad laboral, permanencia en el empleo y defensa de la educación pública. Decir que ponen en juego todo esto porque han sido manipulados por un grupo de dirigentes es un insulto.
Una muestra de hasta dónde llega la ignorancia de Alejandro Ramírez sobre la vida de los docentes es su afirmación de que parte de este retorcido modelo de negocio... es el control del pago quincenal a los maestros mediante cheques. Efectivamente, miles de profesores, sobre todo de zonas rurales, se oponen a que se les pague mediante una tarjeta bancaria. Pero lo hacen no porque sus representantes los controlen, sino por una razón mucho más sencilla: no hay cajeros automáticos donde viven y trabajan.
No es la primera vez que Alejandro Ramírez calumnia a los maestros y a su organización sindical. Las huellas visibles de su encono se remontan a 2015, cuando siendo secretario técnico del gabinete de Desarrollo Humano en la Secretaría de Desarrollo Social fundó Mexicanos Primero, el grupo de presión patronal que busca mandar en el campo de la enseñanza...