Rubén Núñez, la moneda de cambio

La Jornada, 28 de junio de 2016

El profesor Rubén Núñez Ginez está recluido en una celda del penal de alta seguridad de Hermosillo. Antes de ser apresado, la madrugada del pasado 12 de junio, vivía en una sencilla casa de una sola planta en el municipio de Putla, que edificó cuando todavía no era nombrado secretario general de la sección 22.

Rubén no tiene grandes propiedades. No posee joyas ni ropa de lujo. Su fabuloso guardarropa está integrado por camisas de manta bordadas típicas de Oaxaca y prendas que se pueden adquirir en cualquier comercio.

Su espectacular flotilla de coches se reduce a una camioneta Nissan estaquitas, que cambió por una camioneta que usa para transportarse en sus obligaciones sindicales, y una furgoneta que no puede circular porque carece de placas, propiedad de la sección 22 desde hace años. Cuando agentes vestidos de civil lo detuvieron violentamente al norte de la Ciudad de México, se transportaba en el taxi de su primo.

Una de sus posesiones más exóticas, y que según algunos medios es evidencia de las millonarias riquezas que ha adquirido, es un hermoso pavo real. El ave fue un regalo que le hizo un amigo, que sabe del gusto del maestro por la vida silvestre y la cultura tradicional.

El profesor Núñez Ginez es el mayor de cuatro hermanos, de una familia campesina.

Nació el 6 de febrero de 1963 en Concepción del Progreso, mejor conocida como La Hacienda, Tierra del Dios nunca muere, perteneciente al municipio y distrito de Putla de Guerrero, Oaxaca. Su padre es ejidatario. Familiares suyos fueron pioneros en gestionar la llegada de escuelas públicas a la zona.

Putla es una región marcada por el rezago y la pobreza, muy diversa culturalmente. Cinco pueblos indígenas –mixtecos, triquis, tacuates, nahuas y amuzgos– tienen allí su territorio. Está poblado también por afrodescendientes.

Rubén Núñez cursó sus estudios de educación básica en la primaria Guillermo Prieto de la misma población y en la Secundaria Técnica Agropecuaria 151. En 1978 ingresó a la Escuela Normal Experimental Presidente Lázaro Cárdenas para ser profesor de educación primaria.

Rubén siguió estudiando. Se especializó en lengua y literatura, en la Escuela Normal Superior de la Universidad de Chilpancingo, Guerrero. Ya docente en servicio, cursó la maestría en desarrollo educativo, en la Universidad Autónoma de Puebla. Trabajó como profesor de primaria en comunidades rurales de la Sierra Sur, de difícil acceso. Dio clases en San Pedro Yasutatu, a cinco horas de camino a pie. Dio clases de español en la secundaria técnica de su pueblo. En 1990, se incorporó a la Normal Experimental de la cual egresó, y de la que se volvió director. Laboró también en lingüística en la UPN...