Ayotzinapa y las caravanas internacionales

La Jornada, 05 de mayo de 2015

A miles de kilómetros de distancia del municipio de Tixtla, el eco de Ayotzinapa resuena en Cutral Có, localidad petrolera de la provincia del Neuquén, en Argentina, poco más de 35 mil habitantes. Allí, el Instituto Superior de Formación Docente número uno dedicó el actual ciclo lectivo a los 43 estudiantes desaparecidos de la normal rural mexicana. Toda su comunicación sale con ese membrete.

En el instituto les causó una gran impresión una foto publicada en Infonews (http://goo.gl/28owwQ). En ella, 43 alumnos del Colegio Nacional de Buenos Aires (UBA), sentados en cuatro filas, ponen sobre sus pechos una serie de letras pintadas en blanco, con las que escriben el mensaje: Vivos se los llevaron. Vivos los queremos. Ayotzinapa. CNBA. UBA. Sobre las piernas de seis de los que están en primera fila penden las banderas de México y Argentina.

La imagen forma parte de la muestra fotográfica Todos somos Ayotzinapa, organizada por el fotógrafo Marcelo Brodsky en el Pabellón Rojo de la 41 edición de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, en solidaridad con los normalistas rurales desaparecidos. La feria, impresionante esfuerzo de difusión editorial, está dedicada en esta ocasión a la ciudad de México.

Poco antes de iniciarse la feria, los libreros de América Latina que asisten al acto se tomaron una foto en solidaridad con los estudiantes mexicanos de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos. En la instantánea, cerca de 300 personas dijeron a los padres de las víctimas y al mundo: Los profesionales del libro latinoamericano estamos con Ayotzinapa.

La ceremonia de apertura de la fiesta del libro comenzó con un minuto de silencio en homenaje al escritor uruguayo Eduardo Galeano y el recuerdo de los 43 estudiantes mexicanos desaparecidos en Iguala. El ministro de Educación de Argentina, Alberto Sileoni, pidió justicia para ellos.

La exposición fotográfica Todos somos Ayotzinapa exhibe conmovedoras imágenes tomadas en casi todo el mundo en las que se expresan manifestaciones de apoyo, simpatía y solidaridad con los alumnos de la Raúl Isidro Burgos. En la era de las selfies, que entronizan la autorrepresentación y el culto al yo por encima de cualquier otra cosa, la muestra reivindica un lenguaje visual distinto en el que, a través de un retrato grupal, se pone en el centro a una comunidad imaginaria trasnacional unida fraternalmente en la tragedia y la exigencia de justicia.

Marcelo Brodsky, el organizador de la exposición en la Feria del Libro, es un reconocido artista visual con vínculos estrechos con México, que lleva años trabajando alrededor de los derechos humanos y el arte. Su ensayo fotográfico Buena memoria, una conmovedora historia de las desapariciones forzadas en Argentina (http://goo.gl/7Velvg), es, de acuerdo con el editor Guido Indij, posiblemente la muestra de un artista argentino de mayor circulación internacional...