La Jornada, 20 de octubre de 2015
El libro póstumo de Luis Villoro, La alternativa: perspectivas y posibilidades de cambio, es un acontecimiento intelectual. Su pensamiento trastoca radicalmente el orden y el lenguaje dominantes. Cuartea las certezas preponderantes, elabora un nuevo idioma para la resistencia y ofrece un horizonte diferente de la transformación social.
En una época marcada por lo que la llamada Dama de Hierro, Margaret Thatcher, primera ministra británica entre 1979 y 1990, caracterizó como la del reinado del TINA (There is not alternative), es decir, en una era en que no había más discurso posible que el del neoliberalismo y se carecía de opciones para enfrentarlo, Luis Villoro escribió este libro, reivindicando la posibilidad del cambio.
El libro de Villoro cuestiona radicalmente el orden y el lenguaje del capitalismo y el neoliberalismo y niega que representen el fin de la historia o la consagración del fin de las luchas por la emancipación. Reivindica la posibilidad de otro mundo distinto al dominante, explica por qué un Estado monoétnico es un absurdo y sostiene de que otra democracia más profunda que la meramente procedimental es urgentemente necesaria.
La obra recoge, relabora y profundiza parte significativa de las inquietudes intelectuales que comenzaron a gestarse en 1994 con el levantamiento zapatista en México, tuvieron una caja de resonancia en el Foro Social Mundial y echaron raíces en diversas expresiones de lucha antineoliberal en América Latina.
El libro contiene cuatro ensayos sobre temas centrales de la lucha libertaria de los pueblos: la revolución, la democracia, la pluralidad y la alternativa de cambio político. Incluye, además, la correspondencia que, sobre ética y política, intercambiaron el filósofo y el subcomandante Marcos, del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
El volumen regresa, después de un largo periplo, a la preocupación original de Villoro en el terreno de la filosofía y la historia, expresada en su primer libro, Los grandes momentos del indigenismo en México(1950): el desmontamiento del encubrimiento ideológico sobre los pueblos originales presente en la obra de muchos occidentales que se acercaron a ellos en el pasado.
Sin embargo, a diferencia de entonces, La alternativa se ubica del otro lado del espejo. La obra es, en los hechos, una crítica radical al indigenismo entendido como política de Estado. No es ya una aproximación a quienes estudian a los indios, sino una reflexión sobre la transformación política y social desde el universo abierto por el nuevo pensamiento indígena en lo general y el zapatismo en particular. Villoro encuentra en Indoamérica otra forma de ver y vivir el mundo y desde allí piensa las luchas de emancipación...