Guerrero: el fracaso de la evaluación docente

La Jornada, 08 de diciembre de 2015

Guerrero vive asolado por el crimen. Es uno de los estados más inseguros del país. No hay región en la entidad que esté a salvo de la violencia. Tan sólo durante noviembre se perpetraron allí 172 asesinatos, 79 en Acapulco.

No es extrañar, pues, que el pasado 3 de diciembre se haya enviado a la perla del Pacífico a 6 mil policías federales. Desafortunadamente no llegaron a cuidar a los ciudadanos de las bandas delincuenciales. Su misión fue otra: resguardar las instalaciones de Fórum Mundo Imperial, donde se evaluó a los docentes. Los gendarmes fueron enviados no a perseguir hampones, sino maestros insumisos.

El promedio no está mal: 6 mil uniformados para cuidar a 2 mil 77 maestros examinados. Es decir, tres policías por docente.

Sin embargo, pese al enorme despliegue policiaco, las autoridades educativas no pasaron la prueba de la evaluación. Una espontánea rebelión en la granja la descarriló. E, incapaces de admitir su responsabilidad en la desorganización del acto, se apresuraron a culpar a los maestros de lo sucedido. Fue un sabotaje fallido, dijeron.

La historia de lo sucedido el 4 de diciembre en Acapulco es diferente a como la presentó Aurelio Nuño. Aunque no se permitió el acceso de los reporteros al recinto hasta las 4 de la tarde (y sólo después de que protestaron y fueron amagados por los antimotines), las inconsistencias del relato oficial pueden constatarse revisando tres videos que tuvieron amplia difusión en redes sociales y medios electrónicos, y testimonios aparecidos en La Jornada Guerrero, El Surde Acapulco y el canal de televisión de Excélsior.

Unos 3 mil profesores de diversas instituciones y niveles educativos fueron trasladados al puerto desde el día anterior, y hospedados en hoteles de lujo, como el Princess, Pierre Marqués y Resort Mundo Imperial, pertenecientes al grupo Autofin, del empresario Juan Antonio Hernández.

No todos los docentes que asistieron a la prueba eran parte del grupo de notificados. Fueron incluidos maestros que se apuntaron al final porque la autoridad les ofreció beneficios personales. También participaron trabajadores al servicio del gobierno del estado que nada tienen que ver con la educación, a los que se les pidió que asistieran y se hicieran pasar por profesores.

A las 5 de la mañana los examinados se concentraron en el lobby de los hoteles, pues debían estar en Fórum Mundo Imperial entre 5:30 y 6:30. Según el secretario de Educación de Guerrero, José Luis González de la Vega, llegaron 2 mil 630 maestros. Para ingresar a las instalaciones pasaron retenes policiacos dotados de equipo antimotines y unas enormes barras metálicas. Presentaron su identificación oficial y su hoja de notificación. Ya dentro del edificio desayunaron huevo con papas...