El secuestro de la sociedad civil

La Jornada, 17 de abril de 2018

El panista José Francisco Javier Landero Gutiérrez es un político completo. Tiene una notable experiencia partidaria, legislativa y en la administración pública.

En su larga militancia en las filas del blanquiazul ha tenido múltiples responsabilidades: consejero estatal y nacional, secretario de comunicación de su comité nacional y dirigente juvenil. Ha sido dos veces diputado federal. La primera, por mayoría (2003-06). La segunda, por la vía plurinominal (2009-12). También ha sido servidor público: subdirector de Planeación en el Instituto Mexicano de la Juventud y secretario de Planeación en el Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica.

No obstante su apretada agenda partidaria y legislativa como político profesional, el maestro Landero ha encontrado tiempo para dirigir Suma por la Educación y, desde allí, hablar en nombre de la sociedad civil. Es decir, es, simultáneamente, el niño en el bautizo, el novio en la boda y el muerto en el entierro.

Suma por la Educación fue una de las 22 organizaciones empresariales que, el jueves de la semana pasada, publicaron en la prensa nacional un manifiesto en que se presentan como voceros de la sociedad civil. Allí aseguran que México ha cambiado mucho durante las últimas décadas, como resultado del trabajo e incidencia de una red de organizaciones ciudadanas con una agenda tan diversa como los propios problemas nacionales.

Landero Gutiérrez ha estado al frente de Suma por la Educación en dos ocasiones. También ha sido presidenta ejecutiva de la asociación la panista María Teresa Ortuño. Llegó allí colocada por Dios. Militante blanquiazul desde 1973, ha sido legisladora 18 años, delegada de Sedesol y ha buscado (sin fortuna) ser candidata a la gubernatura de Chihuahua. El gobernador Javier Corral la designó directora del Colegio de Bachilleres.

Entre las asociaciones que firmaron el manifiesto de la sociedad civil se encuentra también el Centro de Estudios Políticos y Sociales (Cepos), fundado en 2003. Desde octubre de 2014 lo preside Arturo German Belmont. Activista de la derecha católica más rancia, don Arturo es un viejo militante de la organización secreta ultraderechista El Yunque, y en su juventud participó en el Movimiento Universitario de Renovadora Orientación, responsable de diversos actos violentos en la Universidad Nacional Autónoma de México.

Suscribió también la proclama la Asociación Nacional de Abogados de Empresas (Anade), presidida por el licenciado Alfonso Guati Rojo. El abogado fue en este sexenio subdirector Jurídico Contencioso y Administración de Cartera de Petróleos Mexicanos.

En la lista de los abajo firmantes se encuentra la iniciativa México ¿Cómo vamos?, presidida por Luis de la Calle. Negociador principal del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, que tan desastrosos resultados arrojó para el campo mexicano, el economista De la Calle ha trabajado en el Banco Mundial. Es, además, un muy importante cabildero de los intereses de empresas estadunidenses en México...