La Jornada, 16 de enero de 2001
La aprobación o no de la iniciativa de la Cocopa en el Congreso es la diferencia entre la guerra y la paz en Chiapas. En el corto plazo, su rechazo dañará irremediablemente la reanudación del diálogo. Será, además, un mensaje a los excluidos del país: para ellos no habrá camino legal que resuelva sus demandas de reconocimiento.
2)La suerte que corran los zapatistas será la de los pobres del país. Si el Estado mexicano (esto es, los tres poderes de la Unión) se niega a abrirles espacios legales en la vida pública nacional rechazando la iniciativa de la Cocopa, no habrá para ellos un futuro incluyente.
3)La metáfora como destino: la Mesa para la Reforma del Estado, anunciada con grandes fanfarrias, y creada por Vicente Fox para entretener a Porfirio Muñoz Ledo, se transformará en una ONG. La lógica del actual gobierno parece ser que la democratización del país puede esperar a que primero se realice lo importante. Sin presión social para aprobar la iniciativa de la Cocopa, el futuro de los pueblos indios será convertirse en materia prima para museos, discursos o en una nueva ONG.
4)Chiapas será la medida para evaluar el cumplimiento de sus promesas. La no solución al conflicto provocará a Fox graves dificultades para conservar su credibilidad democrática.
5)Oponerse a la iniciativa de la Cocopa implica rechazar los acuerdos de San Andrés. No todos los acuerdos de San Andrés sobre derechos y cultura indígenas pactados entre el gobierno federal y el EZLN, el 16 de febrero de 1996, están considerados en la iniciativa de la Cocopa, pero prácticamente todos los puntos presentes en ella provienen, textualmente, de lo firmado.
6)El multuculturalismo propuesto por la iniciativa de la Cocopa es perfectamente compatible con el Estado liberal. El documento del Legislativo establece, explícitamente, el respeto a los derechos humanos y el de las mujeres. Tal y como lo han demostrado fehacientemente autores como Luis Villoro y Rodolfo Stavenhagen, los derechos colectivos de los pueblos indígenas no son contrapuestos a los derechos individuales...