La jornada, 21 de septiembre de 2004
No es común en nuestro medio que un político simultáneamente diseñe y ejecute políticas públicas. Los funcionarios gubernamentales que tienen a su cargo posiciones importantes en la administración no son, por lo regular, especialistas en las áreas que están bajo su responsabilidad. Aunque son ellos quienes deciden el rumbo de las áreas bajo su competencia, cuentan regularmente con equipos de asesores que elaboran los planes y programas que ponen en práctica y escriben sus discursos.
Sin ser caso único, el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Santiago Levy, es una excepción notable en el gobierno central. Poseedor de incuestionables credenciales académicas, ha elaborado propuestas de política para el combate a la pobreza, el desarrollo regional, la función del maíz en el libre comercio y seguridad social, que son hoy acciones de gobierno. Simultánea-mente ha ocupado diversos puestos en la administración pública: coordinador de asesores del Programa de Desregulación Económica de Secofi, presidente de la Comisión Nacional Federal de Competencia, subsecretario de Hacienda y director del IMSS.
A pesar de haber trabajado para administraciones priístas, el doctor Levy ocupa un lugar privilegiado en el gobierno de Vicente Fox. Su experiencia incluye también estrecha colaboración con organismos multilaterales de desarrollo como el Banco Interamericano de Desarrollo, donde fue proyectista, y el Banco Mundial, en el que se desempeñó como investigador.
Santiago Levy es un representante destacado de la tecnoburocracia que llegó a la administración pública gracias a su formación en universidades extranjeras de elite y su paso por instituciones financieras internacionales. Firme creyente en los dogmas del Consenso de Washington, el egresado de la Universidad de Boston no ha contendido nunca a un puesto de elección popular ni militado orgánicamente en las filas de un partido o abrazado las causas de la sociedad civil.
Su perfil es el de un tecnócrata que sirve indistintamente a gobiernos del PRI o del PAN, trabaja para el Banco Mundial y podría colaborar en cualquier gabinete presidencial de casi cualquier nación que requiriera sus servicios. Pertenece a ese grupo de especialistas trasnacionales del desarrollo neoliberal que tienen en sus manos la política económica y financiera de la mayoría de los gobiernos del planeta.
Su pensamiento ha tenido destacada influencia en la formulación de distintas propuestas de políticas públicas que se han ejecutado en el país. Sus errores, muchos y graves, han tenido serias consecuencias para los pobres...